Hay algo atávico en esto de respetar el poder de las palabras, y buscar adquirir la fuerza que ellas traen al nombrarlas para evocar a alguien a algo. Para identificar, para señalar, para cosntruir... para inventar... para crear. Para dar vida.
tu texto me trae a la memoria el fragmento de un poema de Joao Cabral de Melo Neto:
"Escojer frijoles limita con escribir: se echan los granos en el agua del barreño y las palabras en la de la hoja de papel; y después se tira fuera lo que sobrenada"
creo que quien escribe busca pepitas de oro o granos de frijoles, eso en realidad no importa, lo que interesa en todo caso es el hallazgo o el extravío.
Edith : Me gustó el poema pero mucho más me gustaron tus tres líneas finales. Me gustó pensar , aunque no sea cierto , que nos da igual hallar o extraviar pepitas de oro o granos de frijoles.
buena economía... siempre siento que cuando las palabras se dicen en exceso pierden su valor y entonces hay que repetirlas para recuperar su peso... si algo duele ya no basta decir dolor, sino dolor-dolor porque la palabra dolor fue dicha tantas veces que perdió la fuerza, saludos, c.
No he podido encontrar el texto de Brecht, que mencionaste en un comentario. Dentro de dos días vuelvo de mis vacaciones y allá, en la gran ciudad, lo rastrearé.
Una de las cosas buenas de volver, después de un viaje profundo, es reencontrar las cosas cotidanas que nos mejoran un poco el día... como el café de la mañana, la señora que pasa vendiendo lechugas todos los sábados, bajar por mi calle y quedarme unos minutos en el puente... volver a mirarme en tu espejo... más allá del mar... Mmm... la verdad es que me gusta mucho pasar por acá...
Me interesan las palabras y los espejos , lo que reflejan y lo que ocultan. Me gusta mirar y ver lo que pasa . Creo que todo puede ser expresado y que el mundo es algo mejor de como nos lo presentan en los telediarios.
8 comentarios:
Hay algo atávico en esto de respetar el poder de las palabras, y buscar adquirir la fuerza que ellas traen al nombrarlas para evocar a alguien a algo. Para identificar, para señalar, para cosntruir... para inventar... para crear. Para dar vida.
El estallido de la palabra "genésico"... para ti.
Y esa condensación de palabras no es sinónimo de avaricia, si no que exprimir la esencia y dar lo mejor de ella.
tu texto me trae a la memoria el fragmento de un poema de Joao Cabral de Melo Neto:
"Escojer frijoles limita con escribir:
se echan los granos en el agua del barreño
y las palabras en la de la hoja de papel;
y después se tira fuera lo que sobrenada"
creo que quien escribe busca pepitas de oro o granos de frijoles, eso en realidad no importa, lo que interesa en todo caso es el hallazgo o el extravío.
Edith :
Me gustó el poema pero mucho más me gustaron tus tres líneas finales.
Me gustó pensar , aunque no sea cierto , que nos da igual hallar o extraviar pepitas de oro o granos de frijoles.
Besos largos.
buena economía... siempre siento que cuando las palabras se dicen en exceso pierden su valor y entonces hay que repetirlas para recuperar su peso... si algo duele ya no basta decir dolor, sino dolor-dolor porque la palabra dolor fue dicha tantas veces que perdió la fuerza,
saludos, c.
No he podido encontrar el texto de Brecht, que mencionaste en un comentario. Dentro de dos días vuelvo de mis vacaciones y allá, en la gran ciudad, lo rastrearé.
Una de las cosas buenas de volver, después de un viaje profundo, es reencontrar las cosas cotidanas que nos mejoran un poco el día... como el café de la mañana, la señora que pasa vendiendo lechugas todos los sábados, bajar por mi calle y quedarme unos minutos en el puente... volver a mirarme en tu espejo... más allá del mar...
Mmm... la verdad es que me gusta mucho pasar por acá...
Qhe Lindo !!!
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