martes, enero 21, 2014

Ven de nuevo a jugar




Ven de nuevo a jugar al escondite.
Las puertas del jardín están cerradas
y las voces se alejan.

Oigo voces extrañas,
palabras de  un idioma extranjero
que no están en tu boca.

No te encuentro y te busco
mientras la noche se agranda ante mis ojos
y el invierno  está  ya asomándose al río.

Ven de nuevo a jugar en la espesura.

La gruta dibujada bajo el muro,
el alto laberinto de los setos,
las acacias dormidas,
las palmeras altísimas perdidas en su cielo.

Ven de nuevo a jugar en el jardín oscuro
entre columnas de mármol derribadas,
estatuas  que rodaron por el suelo
y blancos  capiteles que serían
alguna vez corintios.

Ven de nuevo a jugar entre las rosas,
las manos y los labios  sorprendidos
en un tiempo anterior a todas las desgracias.





miércoles, enero 08, 2014

No hay poesía







No hay poesía
en la cara  feroz de todos  los inviernos,

el rostro amoratado por el frío,

la voz que me suplica un pedazo de pan
o una moneda suelta.

No hay poesía

en la miseria escondida
bajo  cartones y mantas,

los días sin historia,
la barba encanecida, el alcohol y la niebla.

No hay poesía

en el paso apresurado de la gente
que no quiere mirar.