lunes, noviembre 14, 2011

de vida beata



En un viejo país ineficiente ,
algo así como España entre dos guerras
civiles, en un pueblo junto al mar,
poseer una casa y poca hacienda
y memoria ninguna. No leer,
no sufrir, no escribir, no pagar cuentas,
y vivir como un noble arruinado
entre las ruinas de mi inteligencia.



Jaime Gil de Biedma . Las personas del verbo

2 comentarios:

arlequín dijo...

Buenas noches Colombine, acabo de tomar mi cucharadita de luna. Me voy a probar suerte, quizás tenga algún sueño bonito,quizás lo recuerde al despertar

Colombine dijo...

dichoso usted
que puede dormir
y tal vez soñar
y hasta alcanzar la luna

¿ o acaso se la envían
embotellada?